A estas alturas ya sabrás que no soy fácil de quebrar. Tantas idas y venidas me enseñaron a caminar sin mirar atrás, sin pensar en quién vendrá. Seguir leyendo
A estas alturas ya sabrás que no soy fácil de quebrar. Tantas idas y venidas me enseñaron a caminar sin mirar atrás, sin pensar en quién vendrá. Seguir leyendo